Se inauguró Napulé Notte, restaurante italiano del chef que supo cocinar para De Niro, recorrer el mundo y que estuvo dentro de las cocinas más prestigiosas del mundo: Fernando Lo Coco. La gran apertura del verano en el Este. 

Fernando Lo Coco nació en General Madariaga, Provincia de Buenos Aires y estudió en el Instituto Argentino de Gastronomía (IAG). Pudo trabajar en Londres y fue ahí donde consiguió vivir en primera persona los secretos de los restaurantes premiados con estrellas Michelin: fue chef en lujosos restaurantes, cocinas de grandes hoteles, e incluso en entidades diplomáticas como la embajada de Portugal. Tuvo la oportunidad de cocinar para grandes personalidades de la política como la familia Obama, de la monarquía y celebridades de Hollywood, entre ellas el actor Robert De Niro.  

Con la pandemia, se vio obligado a repensar sus planes y el 1ro de enero de 2021, junto a su hermano, abrió Casa Oxalis (ovxalis es un trébol comestible con sabor cítrico) en Pinamar. Su ultima apertura fue Napule Notte, restaurante italiano que inauguró este verano en Punta del Este.  

Viajaste por todo el mundo, ¿cuál es la gastronomía que te motiva más y por qué?  

Veo la corriente de la alimentación de manera globalizada, como un verdadero acto de amor el querer ser parte de la industria de cocinar y servir alimentos. Tengo formación -como la mayoría de los cocineros-, inclinación y educación francesa. Incluso existe en los profesionales un léxico culinario francés que se aloja en todas las cocinas del mundo… Por lo tanto, a casi todos nos atraviesa lo francés y su cultura, pero disfruto singularidades ya sea de españoles, ingleses, italianos, o japoneses. 

Regresaste al país y te instalaste en Pinamar, ¿por qué la elección de ese lugar en el mundo? 

Mi familia es oriunda de aquí de toda la vida, y me parecía interesante volver a conectar con cosas que tengo vividas, intentar trabajar en lazos estrechos, aprender a ser hijo, hermano, tío, padre, pareja. Y en mi oficio, ya con más aplomo, volver a conectar con el entorno. Larralde decia: ”Conocí Mi Pueblo cuando me fui, empezas a extrañar las piedritas, los huellones, el barro, el arroyo, y no es nostalgia, es empezar a conocer las cosas en las que uno no se había fijado antes”. Creo que eso una síntesis. 

¿Cómo llega el proyecto Napule Notte a tu carrera?  

Napulé llega a través de Omar Morales, persona a la cual admiro, respeto y escucho muchísimo. Con él compartimos desarrollos en otro grupo, en Argentina y en otros países. Así que el inicio se dio ahí, luego me presentó a Vitto Moya y terminé de entender todo lo que ellos querían transmitir al público que visite Napulé al oírlo contarme cosas tan profundas de su seno íntimo familiar, acerca de su relación con la alimentación, momentos, hasta ciertos gestos de su madre al hablar de comida. Fue para mi más que suficiente razón para sumarme. Deseamos y creemos que Napulé es el inicio de un lindo viaje. Creemos que seguiremos sumando espacios y experiencias, ya sea en Buenos Aires como alrededor del mundo para poder ofrecer el adn Napulé a quien desee conocerlo. 

¿Cuál es el sello distintivo del menú?  

Es comida del Sur de Italia. La idea central es oficiar de “embajadores”, no sólo de la alimentación, sino abarcar el lifestyle, música, moda, cultura, arte y también la forma de conectar y hacer llegar un gesto nítido como es dar de comer. Poner en juego no sólo la tradición sino también la emoción que eso conlleva. 

¿Cómo fue cocinar para De Niro y otras personalidades de Hollywood, de la política y la monarquía? 

Recuerdo me llamó quien era mi jefe y me comentó quién estaba arribando al restaurante. Fue lindo, como fue cada una de las personas para las que me tocó cocinar. Siempre intento dar lo mejor en el momento que me toca hacerlo. Esa época fue de trabajo duro, horas, viajes, y un sin número de experiencias y contactos que mantengo hasta la actualidad. Cuando uno se pone “incómodo”, digamos, saca lo mejor de sí para evolucionar. Y yo en ese punto me considero un insistidor, porque simpre trato de mejorar cada día. Por eso mi balance es positivo al final de ese camino. 

Nombrame algunos chefs que admires y por qué.  

Admiro a un montón. A algunos los conozco, y otros sólo de estrecharles la mano o quizás alguna charla o intercambio de opiniones. No voy a nombrar a amigos chefs reconocidos que tengo vínculo estrecho por que simplemente lo que pienso me encargo de decírselos y de cultivar mi amistad, pero por ejemplo, me llama la atención el trabajo de Thomas Keller, por la longevidad y pasión por hacer lo correcto en nuestra industria. A Rasmus Kofoed por la inspiración, el talento y la superación. Como me atraen las competencias, simplemente fue revelador para mí. De Rene Redzepi me interesa su visión. Él creyó en sí mismo y dejará una huella en la industria. Ferrán Adriá, Joël Robuchon, Daniel Humm, el mismo Mauro Colagreco, que es como nuestro Messi, un embajador, ¡el diferente!. Y podría seguir, obvio, hay miles.  

Actualmente hay muchas corrientes gastronómicas que se cruzan. ¿Hacia dónde creés que se dirige la gastronomía?  

Creo en el oficio por hacerlo bien, y en hacer lo correcto, aprendiendo de lo pasado. Aunque pocos lo hagan. Eso sería, en mi humilde opinión, hacia dónde quisiera que vaya la gastronomía más allá de hacia dónde creo que va.  

Considero que cocinar es un enorme acto de amor y con ese simple gesto dejaría de lado muchas mezquindades o diferencias que atraviesan la industria de los alimentos para volver a conectar con el productor, con el trabajo duro y la honestidad de querer hacerlo mejor y mejor cada vez en todos los eslabones de la cadena. Hasta que lo consumís vos, te llega a la mesa. 

¿Qué recomendarías del menú de Napule Notte y por qué? 

Todo. Es amplio, no kilómetrico pero es puntual en sus raíces y creo que encierra desde platos básicos hasta elaboraciones más complejas en su ejecución. Debes saber que, al estar de vacaciones, uno tiene -o mejor dicho- se toma un minuto para despejarse y sea cual fuere tu presente cuando nos visites creo que tenemos varias cosas para tentarte y satisfacer tus necesidades -ya sean de festejo, brindis, de encuentro, de familia, de alegría-, y recibirte en nuestro espacio para que puedas llevarte un poquito de Italia en tu corazón ese día.