Escondido en un rincón de los Valles Calchaquíes, el hotel boutique Estancia Colomé es a la vez, una bodega, un museo y una experiencia mística.
Corría el año 1998. El empresario suizo Donald Hess estaba buscando un terreno para fundar una bodega. Ya había visitado Chile y Mendoza, y se fue con la sensación de que había poco por hacer. Entonces viajó a Salta. Sentado en un bar en la pequeña ciudad de Cachi, le pidió al mozo que le sirviera un vino local. Le ofrecieron las mejores bodegas de los Valles Calchaquíes. Todas etiquetas ya conocidas por el empresario.
El insistió, y pidió que le sirvieran un vino característico de la zona, eso que tomaban ellos, los locales. Le sirvieron un jugo de uvas oscuro, espeso, turbio pero poderoso y con mucho carácter. Al día siguiente, Hess fue a conocer al dueño de la finca en la que se había hecho ese vino. Era Raúl Dávalos, entonces propietario de la Finca Colomé, una bodega fundada en 1831 que ostenta el título de ser la bodega más antigua de Argentina aún en actividad.
El proceso no fue inmediato. En 2001, Hess logró comprar la propiedad y fundó, primero la bodega Amalaya y luego Colomé, no sólo una de las fincas más altas del mundo sino también una experiencia única que despliega lo mejor del arte, la gastronomía y la hotelería de Argentina. Su objetivo: ser pionero en la categoría llamada “vinos de altura”.
Arte: una experiencia única en el mundo
Donald Hess es un destacado coleccionista de arte contemporáneo. The Hess Art Collection incluye obras de Andy Goldsworthy a Francis Bacon, Katsura Funakoshi, Gerhard Richter y Robert Rauschenberg, entre otros artistas.
Enamorado de las hipnóticas instalaciones de luz de Turrell, Hess creó el Museo James Turrell, el único museo del mundo dedicado exclusivamente a su obra. Inaugurado en 2009 dentro de la finca Colomé, se convirtió en el corazón de una propuesta que une magistralmente la hotelería y el arte.
Se trata de 5490 m2 de exposición divididos en nueve cámaras construidas según las especificaciones del artista californiano. Entre las obras destacadas se encuentra Spread, un entorno de 1200 metros cuadrados que envuelve a los visitantes con una vibrante luz azul. Turrell denomina a estas obras con la palabra alemana “Ganzfeld”, y describe la pérdida total de la percepción de la profundidad y el fenómeno óptico en el que no hay nada que el ojo pueda enfocar.
El maridaje: vinos de altura y gastronomía de autor
A cargo de la bodega está Thibault Delmotte, gerente de enología, quizá el francés más argentino del mundo. Un hombre nacido en Borgoña que se fue de una de las zonas vitivinícolas más poderosas de Francia a un lugar remoto en Salta para tener la posibilidad de dejar una marca de autor. Es el responsable de la excelencia de los vinos de Colomé, reconocidos mundialmente por su expresividad, consecuencia de la altura y la amplitud térmica.
A cargo del diseño del menú está Patricia Courtois, encargada de la reconfiguración de los sabores salteños ancestrales directo de la granja que crece a pocos metros de la cocina.