Sol Juárez, Gerente de Producto e Innovación de Azcuy, entrevistó a Carlo Ratti, Director del Senseable City Lab, un grupo de investigación del MIT focalizado en el futuro del urbanismo.
Arquitecto e ingeniero de formación, el Profesor Carlo Ratti da clases en el Massachusetts Institute of Technology (MIT), donde dirige el Senseable City Lab, un laboratorio digital que funciona dentro del Departamento de Estudios y Planificación Urbana, integrado por más de 50 investigadores provenientes de todo el mundo, que trabajan para resolver los problemas reales de la ciudad. Se graduó en el Politécnico di Torino y en la École Nationale des Ponts et Chaussées en París, y más tarde obtuvo su Master of Philosophy y su Doctorado en la Universidad de Cambridge, Reino Unido. Es socio fundador de la oficina internacional de diseño e innovación CRA-Carlo Ratti Associati. Ratti es una voz líder en el debate sobre el impacto de las nuevas tecnologías en la vida y el diseño urbano. Sol Juárez conversó con él para actualizar el panorama de las investigaciones acerca de la ciudad. Un relato de urbanismo virtual, Big Data pero con un centro claro: el factor humano.
¿Qué es el urbanismo? y ¿cuál es su principal objetivo?
Shakespeare escribió una vez: “¿Qué es la ciudad sino la gente?” El urbanismo se ocupa de las ciudades y, más específicamente, de cómo las personas interactúan en el espacio físico. Mejorar las relaciones humanas es entonces el principal objetivo del urbanismo.
Dirigís el MIT Senseable City Lab, ¿podrías contarnos un poco más acerca de lo que hacen en este equipo de investigación?
El Senseable City Lab consta de más de 50 investigadores de todo el mundo, cada uno con sus antecedentes y habilidades particulares, que incluyen arquitectura y diseño, matemática, economía, sociología y física. Trabajando codo a codo, nuestro equipo se centra en los problemas reales de la ciudad, desde la energía hasta el tráfico, desde la participación humana hasta la gestión del agua. Los sensores, la Internet de las Cosas (IOT) y otras formas de tecnologías digitales son algunos de los dispositivos que utilizamos para recopilar big data, lo que nos ayuda a comprender mejor las interacciones de los ciudadanos y, a su vez, hacer que el espacio urbano sea más habitable.
¿Qué están investigando actualmente acerca de las ciudades del futuro?
Cómo podemos hacer que las ciudades sean más sostenibles, desde un punto de vista social y medioambiental.
¿Qué problemas considerás que existen en las grandes ciudades del tercer mundo y cuáles serían las principales acciones que impulsarías?
Algunos pueden considerar que las ciudades de los países emergentes están rezagadas, pero en realidad veo inmensas oportunidades para que se reinventen a un ritmo sin precedentes. Por ejemplo, la adopción de teléfonos móviles en varias naciones africanas ha estado entre las más rápidas del mundo, a pesar de que la incorporación de infraestructuras de telecomunicaciones relevantes se hiciera más tarde que sus contrapartes occidentales. Sobre la base de esa infraestructura, Kenia y varios países vecinos crearon aplicaciones para la banca móvil y el seguimiento instantáneo de las condiciones de los cultivos, que se convirtieron en plataformas de lanzamiento efectivas para nuevos negocios. Este fenómeno es conocido como “salto de rana”, mediante el cual los países o regiones emergentes saltan por delante de los que habían estado antes y exportan ideas innovadoras a los más ricos.
¿Cuál es el límite del big data y la privacidad de las personas para colaborar en ciudades más eficientes?
Nuevamente, creo que tales límites deben explorarse en conjunto con las personas. Nuestro equipo en el MIT fue uno de los primeros, allá por 2004, en trabajar en el uso de datos de teléfonos móviles para describir la dinámica de las ciudades. Los resultados se exhibieron en la Bienal de Venecia, ya que se invitó al público a debatir los beneficios y riesgos asociados. Casi 20 años después, la cantidad de datos que se recopilan de dispositivos individuales y colectivos ha crecido enormemente, al igual que regulaciones como el RGPD de Europa (Reglamento General de Protección de Datos).
Si tuvieras que imaginar una ciudad “ideal”, ¿cuáles son las características que debería tener?
De manera similar al maravilloso volumen de Georges Perec, Espèces d’espace” (en el interior, sueña con un apartamento donde cada habitación da a un distrito diferente de París), mi ciudad “ideal” probablemente tendría un poco de muchas ciudades. Quizás el clima de Ciudad del Cabo, la topografía de Praga, el skyline de Manhattan, la cocina fusión de Sydney, y por qué no, la vida nocturna de Río de Janeiro.