Conversamos con la presidenta de la Fundación arteba, Larisa Andreani, para actualizar el panorama del arte argentino.  

Larisa Andreani, directora en Grupo Logístico Andreani, es la segunda mujer en ocupar el cargo de presidenta de la Fundación arteba. Desde hace dos años que está a cargo de la organización de la feria de arte más importante a nivel local, acompañada por el abogado y coleccionista Eduardo Mallea en la vicepresidencia. 

 
Con amplia experiencia como directora de la empresa de mensajería y correo fundada por su abuelo, es miembro del Consejo de Administración del Banco de Alimentos y ha sido miembro de la Asociación Amigos del Museo de Arte Moderno de Buenos Aires desde 2015 -y presidente de 2017 a 2019. La feria, una de las más importantes a nivel regional, recibió este año a más de 65 mil personas y fue un éxito en venta de obras.  

¿Cómo fue que te acercaste a la Fundación arteba?  

Me invitaron a participar del Consejo de Administración de Fundación arteba en 2020 y accedí porque tenía experiencia de gestión con la asociación de Amigos del Moderno y porque me gusta todo lo que esté relacionado con el arte. Se abrió un lindísimo espacio de relacionamiento. Luego llegó el momento de elegir presidente.  

Votamos muchas personas e hicimos un proceso muy prolijo y fue muy contundente mi elección. Cuando llegó el momento de aceptar el puesto, atravesé el miedo porque hace bastante tiempo que decidí no dejar de hacer cosas por miedo. 30 años de historia, el prestigio y la potencialidad que tiene arteba en el ecosistema del arte fueron claves para aceptar el desafío de liderar esta institución. Pero lo que más motivó mi decisión de tomar la presidencia de la Fundación fue todo el proceso previo de mirar hacia adentro. 

¿Qué evolución pudiste ver en la Fundación y en la Feria en estos últimos tiempos?  

Hacia fines de 2020 comenzamos un contundente proceso de escucha al ecosistema del arte, manifiesto o biblia de nuestra gestión. Este trabajo lo hicimos con gente que admiro y respeto muchísimo. Todo nuestro trabajo se encamina a desarrollar estrategias que puedan servir a que los artistas desarrollen su producción en las mejores condiciones posibles, a que las galerías puedan vender ese trabajo, a que las colecciones e instituciones puedan atesorar y hacer circular esas obras que forman parte de la cultura nacional. El arte y la cultura siempre han servido para reflexionar sobre nuestro presente, y también son espacios en donde podemos imaginar nuestro futuro. En ese sentido, en un momento como el que vivimos, acercarse al arte es más necesario que nunca. La escena de hoy era impensable hace 30 años. La madurez y crecimiento del sector se ve no sólo en el crecimiento de galerías y proyectos profesionales, sino que también desde hace un tiempo, existen instituciones como Meridiano, Giro, Junta y Faro, que representan galerías y otras manifestaciones asociativas similares, con quienes tenemos el placer desde arteba de dialogar. 

Contanos cuáles son los objetivos principales de la Fundación actualmente. 

La convicción de arteba es acompañar el desarrollo del sector artístico y del mercado del arte y apoyar al ecosistema del arte. Buscamos salir al mundo desde una mirada que integre a todo el país. Acompañar la inserción del arte argentino en circuitos regionales e internacionales.  

Estamos trabajando sobre un modelo de feria económicamente sustentable, tanto para la fundación como para los que componen la escena local, y también ponemos foco en desarrollar diversas acciones a lo largo del año que nos integren como país para salir a dialogar con otras escenas. Al mismo tiempo, necesitamos expandir nuevos públicos para fortalecer nuestro propósito que es la difusión de las artes visuales argentinas. Estamos trabajando en tener nuevos públicos que se sientan representados e incluidos. 

¿Cómo creés que está posicionado el arte argentino en la escena latinoamericana?  

El arte en Argentina no tiene medición de su impacto económico y como no tiene estos datos, no tiene políticas públicas para generar incentivos; y como no están esas políticas públicas para generar incentivos, no termina de desarrollarse. Entonces, las conversaciones que venimos dando con los organismos de gobierno es justamente eso. Brasil, por ejemplo, hace 20 años tenía un mercado de arte más chico que el nuestro. Y veinte años de políticas públicas, de incentivos, de descuentos impositivos, de fomento de artes, de no tener tasa en la importación y la exportación lo convirtieron en el sector económico más fuerte que hay en artes visuales en Latinoamérica. La calidad del arte en Argentina, se dice que es mucho mayor a la calidad de Brasil; sin embargo, ellos generaron un sector productivo y en precios que cotizan a nivel internacional. Con lo cual, se ve que la fórmula no es tan difícil, sino trabajar en conjunto, sostenido y con un objetivo a largo plazo. 

¿Cuál es el objetivo principal que te planteaste en este recorrido como presidente de la Fundación?  

Somos un equipo que apunta a ahondar en un mayor espíritu colaborativo, de escucha permanente, más inclusivo, de más horizontalidad y nos motiva a ser parte de un todo que mira hacia adelante sabiendo de la influencia que genera la fundación en nuestro país y en toda Latinoamérica.  Mis ejes de gestión están dados por el contexto: equilibrio, adaptabilidad al cambio, flexibilidad.  

¿Cómo es el diálogo de arteba con otras ferias a nivel regional y mundial?  

Hoy vemos una vuelta de la mirada hacia lo local en pos de la diversidad, existe una revalorización de lo distinto, de lo que cada individuo o comunidad propone como propio, único y original, por eso desde nuestra fundación celebramos las iniciativas que trabajan sobre los diferentes territorios que componen nuestro país. Estamos convencidos que es desde esta mirada integradora federal desde la que tenemos que construir alianzas con la región y salir a proponer nuestras ideas en los circuitos artísticos globales. Apoyamos institucionalmente a las ferias que se realizan en Córdoba, Rosario, Santa Fé y Corrientes, este año visitamos también la Bienal de Venecia y las ferias de Madrid, Sao Paulo, Rio de Janeiro, Bogotá y Miami y vamos a seguir profundizando estas relaciones. En varias de estas ferias hemos organizado eventos institucionales y visitas guiadas por la presencia argentina, para público local e internacional. 

Arteba es una de las únicas ferias organizada por una Fundación, ¿cierto?  

Nosotros entendemos el arte como industria productiva que da trabajo a muchas personas en Argentina. Las acciones de arteba posibilitan no sólo que los y las artistas vivan de su trabajo, sino que exista trabajo para curadores, galeristas, diseñadores, imprenteros, montajistas, iluminadores, gestores culturales, periodistas, fotógrafos, editores de vídeo, equipo de redes sociales, servicios gastronómicos de la feria, la empresa de limpieza, personal de seguridad, fletes, personal del estacionamiento, etc. Son miles de personas que trabajan arduamente para lograr la feria anual. Además de las galerías participantes tenemos el apoyo de empresas participantes y es gracias a ellas que esto sucede. Apoyar nuestra feria es acompañar uno de los eventos culturales más importantes del país, pero es también fomentar la inclusión y formalización de puestos de trabajo.